Y sueño que desde la distancia oyes mi desconsolado llanto. Que surcas océanos de abruptos kilómetros con tu solo pensamiento que llega feroz y a la vez dulce para mecerme en su cordura.
Sueño con tu mano, con aferrarme a ella y sueño con tus ojos, con perderme en la mirada que cuando me buscaba, apenas me encontró.
Sueño con que vienes, desatas mis pies de la tierra y me llevas contigo.
sueños que se alimentan de una realidad extraña
ResponderEliminarsaludos
horacio
Tienes razón, cuando las palabras salen, es porque el corazón está más vivo que nunca.
ResponderEliminarUn beso
Me encanta :)
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